Varias unidades sanitarias fueron atacadas con piedras y palos en diferentes oportunidades, cuando se presentaron para atender víctimas por hechos de inseguridad
Por Fabián López | Para LA NACION
SAN MIGUEL DE TUCUMÁN.- Autoridades sanitarias y trabajadores del área en esta provincia manifestaron su preocupación por los ataques a ambulancias ocurridos en los últimos días, en medio de un preocupante clima deviolencia social.
Ayer a la madrugada, dos ambulancias del Sistema Provincial de Salud (Siprosa) fueron apedreadas y golpeadas mientras atendían a víctimas de sendos hechos de inseguridad.
Uno de los incidentes se produjo aproximadamente a la 1.30, en la localidad de Lules, al sur de la capital, cuando la unidad sanitaria asistía a una persona que había resultado herida con un arma blanca durante una pelea entre grupos antagónicos. “La ambulancia fue recibida con piedras y palos y terminó dañada, con el parabrisas roto. Es una locura, esto no tiene sentido. Los profesionales que viajaban en la unidad tuvieron que escapar sin atender al paciente”, detalló Héctor Barrientos, jefe de Comunicaciones, Logística y Transporte del Siprosa.
El funcionario informó que un hecho similar se produjo horas después en la ciudad de Alderetes, al este de San Miguel de Tucumán, cuando una ambulancia que trasladaba a un paciente al Hospital de Niños fue apedreada desde un costado de la ruta y una de sus ventanas laterales resultó destrozada. “Estamos preocupados, no pasa por un solo hecho, no podemos ayudar a las víctimas, nos dañan los vehículos, son muchas cosas”, se quejó.
Un tercer ataque se produjo el fin de semana en la zona de La Aguadita, al norte de esta ciudad, donde los plafones de un móvil sanitario resultaron dañados luego de ser apedreado. “No lo entiendo, no hay palabras para calificar esto. Uno se pone mal por uno y por los compañeros. Hago un llamado a la gente, les pido mesura, se están pasando todos los límites”, expresó Barrientos en declaraciones radiales.
El ministro de Salud de la provincia, Pablo Yedlin, repudió hoy los ataques a las ambulancias. “Estamos muy preocupados; pido que respeten nuestras tareas. Llegamos a los lugares a levantar las víctimas, no somos parte de los conflictos. Lamentablemente esas ambulancias tuvieron que salir de uso”, dijo en conferencia de prensa.
Por otro lado, la semana pasada, el Sindicato de Trabajadores Autoconvocados de la Salud (Sitas) denunció que hay profesionales que prestan funciones en algunos Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) del interior que tienen miedo ir a trabajar debido a los robos de los que son víctimas. La médica Adriana Bueno, titular de ese gremio informó sobre dos asaltos en los que los empleados fueron amenazados con armas de fuego..